Las Sansevieras son plantas herbáceas y rizomatosas procedentes del sur de África y sur de Asia.
Formando un grupo de unas 130 variedades, se encuentran incluidas en el género de las Dracaenae.
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Las Sansevieras son plantas herbáceas y rizomatosas procedentes del sur de África y sur de Asia.
Formando un grupo de unas 130 variedades, se encuentran incluidas en el género de las Dracaenae.
Su gran resistencia y adaptación al clima y hogares europeos ha hecho de ella una planta muy popular que probablemente todos conozcan y hayan visto o tenido alguna vez.
Por esta gran popularidad se le han dado muchos apodos, siendo los más conocidos 'La Espada de San Jorge', ' El Rabo del tigre' y sobre todo 'La Lengua de la Suegra'.
Al ser una planta herbácea no alcanza mucha altura, como máximo poco más de un metro, y crece de forma agrupada o arosetada entorno a su raices rizomatosas.
Su crecimiento es muy lento. Algunas variedades llegan a desarrollar tres, cuatro y hasta cinco hojas al año mientras que otras permanecen algunos años sin hojas nuevas.
Sus hojas son siempre alargadas, duras y carnosas, parten del rizoma y acaban en punta más o menos afilada. La coloración es verde oscura con bordes amarillentos o gris ceniza.
La variedad más común y conocida es la Trifasciata, que destaca por sus bordes amarillos y su color verde jaspeado y brillante.
Otra variedad más novedosa es la cylindrica, cono hojas muy rígidas de color verde oscuro con forma de tubo y acabadas en punta.
En muchas ocasiones, y debido a su lento crecimiento, se cubren los extremos de sus hojas con ceras de colores con fines decorativos.
La resistencia y dureza de estas plantas hace que su cuidado sea extremadamente sencillo.
Aunque se desarrollan mejor con mucha luz indirecta pueden sobrevivir en zonas poco iluminadas y también en zonas expuestas al sol.
Necesitan una temperatura entre 15 y 25 grados pero soportan iguelmente periodos de mucho calor e incluso heladas de hasta 5 grados bajo cero. De ahí que se puedan ver en muchos jardines de paises mediterráneos.
Tampoco necesitan mucha agua. Prefieren el suelo ligeramente seco y por supuesto nunca encharcado, por lo que el substrato donde se planten debe tener buen drenaje. Su cultivo en interiores solo requiere un riego ligero y muy ocasional similar al de las plantas crasas, sin necesidad de pulverizaciones en sus hojas.
Un dato curioso de estas plantas es su alta capacidad para purificar el aire donde se encuentren.
Su porte estilizado, su facilidad de cultivo y su resistencia hacen de las Sansevieras unas plantas muy utilizadas en la decoración de interiores.
Seguro que hay un sitio para ellas en tu hogar!
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